La música nos acompaña en cada momento de nuestra vida, incluso antes de nacer los médicos recomiendan a la futura mamá que hable con la tripita, le ponga música y la estimule con distintos sonidos.
A medida que crecemos la música nos acompaña con canciones para recoger juguetes, en los cumpleaños, en juegos, vacaciones, navidades…es decir ¡En todo lo que es divertido!
Aunque no te lo creas, escuchas música cada día ya sea de una forma o de otra ¡Y te lo voy a demostrar! por ejemplo, cuando vas a comprar, el supermercado tiene música de fondo, normalmente marchosa para que cojas rápido los productos y te vayas pronto a casa, o en la televisión. ¿Qué películas, series o programas no empiezan con una musiquilla pegadiza?
Otro ejemplo claro son los anuncios ¿A quién no se le ha pegado la canción de alguno y ha estado cantándola durante todo el día? Y sin ir más lejos ¡Nosotros mismos! ¿No te ha pasado estar haciendo la comida, limpiando la casa o estar dando un paseo tranquilamente y darte cuenta de que estás canturreando algo?
¿A que te has visto reflejado en alguno de estos ejemplos? ¡Te lo dije!
Esto nos pasa a todos cada día y es porque la música nos divierte, nos hace sonreír y viajamos con ella al pasado para recordar vivencias y momentos felices de nuestra vida ¡Incluso puedes recordar un momento concreto y asociarlo con una determinada canción! ¿A que sí? Seguro que acabas de pensar en alguna.
La música tiene multitud de beneficios físicos y psicológicos, aparte de entretenernos y divertirnos te voy a contar algunos más:
Aumento de la memoria, atención y concentración.
La música tiene muchos elementos sonoros y estos ayudan a un desarrollo de la memoria del oído, ya que al ser agradable tiene más facilidad de aprendizaje y de poder recordarse.
Cuando escuchas música, se ejercita tu cerebro de una forma única, está científicamente comprobado que la música hace funcionar el cerebro de una forma diferente a como lo hace de forma habitual, las neuronas se activan por los distintos sonidos y estimula distintas partes del cerebro, esto es lo que hace conectar la música y la memoria.
Una escucha diaria de música te hace fortalecer y mejorar tu memoria, tu capacidad de atención y concentración. Pruébalo y lo comprobarás, y sobre todo ¡Cuéntanoslo!
Mejora la capacidad de comunicación y expresión de nuestros sentimientos.
Muchos centros dedicados a las personas mayores ya trabajan la musicoterapia con ellos, con canciones que les llevan a experiencias pasadas tanto buenas como malas, para después desahogarse y hablar de ello. Esto tiene un efecto muy positivo ya que está demostrado que cuando cuentas tus alegrías a otras personas vuelves a tener esa bonita sensación de felicidad, mientras que cuando cuentas tus penas logras desprenderte de esa sensación de angustia.
Mejora la coordinación y el equilibrio.
Jugando con la música y tu propio cuerpo puedes reducir el riesgo de caídas por problemas de equilibrio o movilidad además de mejorar en cosas tan cotidianas e importantes como caminar.
Podemos dar palmadas al ritmo de la música, acompañarlo con “pisotones” también al ritmo, chasquidos con los dedos, golpes con brazos en muslos, tocarnos la cabeza… y podemos alternar estos sonidos entre ellos.
Si eres un poco más marchoso o marchosa, ¡Qué mejor que divertirte bailando!, moviendo las caderas al ritmo de la música y pasándotelo bien, te mejorará el ánimo y tus movimientos cada vez serán más rápidos y ágiles.
Como verás, las posibilidades son ilimitadas. Ya no tienes excusa ¡Échate un bailecito!
Y si bailar no es lo tuyo, puedes cantar y también verás mejorada tu capacidad pulmonar, es decir, que no tendrás esa sensación de ahogo en algunas actividades de tu vida cotidiana, porque al cantar te obligas a respirar mejor y si lo haces de forma habitual, obtendrás mucha mejora. Además que cantar es la forma perfecta para expresar tus sentimientos, prueba a hacerlo y comprobarás que te sentirás mucho mejor al finalizar la canción.
Resumen
La música, tengas la edad que tengas es esencial, nos acompaña en todos los momentos de nuestra vida de una forma o de otra, ya sean momentos felices o tristes, está demostrado que cada día escuchas alguna canción o música y que aunque sea casi inconsciente para ti, no lo es para tu cerebro y produce multitud de beneficios tanto psicológicos como físicos.
Como consejo personal te digo, canta, baila, escucha música, diviértete con ella y haz el gamberro, añádela en tu día a día y verás como tu estado de ánimo no para de crecer haciendo más felices también a las personas de tu alrededor.
Así que dime… ¿Qué canción vas a escuchar ahora mismo? Yo la mía, la tengo clara.
Ángel Júdez. Licenciado en ciencias de la actividad física y del deporte.
Nº de colegiado: 64363. (COPLEF Madrid).
